Adaptarse
a la gente inmediatista es sin duda tarea difícil ya que estas personas tienen
un mundo “visible” y austero. El mundo para ellos es lo que se ve y no lo que
se siente.
Entonces
sus temas de conversación suelen variar depende a la edad pero siempre son los
mismos. Difícilmente estas personas te puedan regalar una conversación
interesante y profunda sino que por lo contrario se limitan a contar cosas
vividas y vivencias de sus seres queridos como por Ej. (que nota se sacó el
nieto en el colegio, a cuanto esta el Kg. de pan o algún que otro comentario de
actualidad que salió en el diario ese día)
El
dialogo con ellos es sin duda una adaptación para caerles simpático ya que la
visión de esas personas hacia tu persona puede llegar a ser equivocado tildándote
de “extraño” “bohemio”, “loco” y “extravagante”. Es decir todo lo que ellos no
entiendan es “raro”
La
sensación de uno, soberbio para muchos, humilde para otros, es siempre la
misma: un mosquito riendo del león…el tema es que cada uno se asume con el rol
de León dejando al mosquito de lado….quien es quien??
Para
los espíritus soñadores ellos son los mosquitos ya que su mundo es reducido, en
cambio para la gente inmediatista uno es el mosquito, pero no tanto por lo
volador sino por lo diminuto, aunque es difícil que piensen estos planteos
porque tiene cosas mas importantes que pensar como “comprarse un microondas”
Inmediatistas
con los mismos ojos, pero diferente visión, ojos lindos muchas veces pero
carentes de horizontes, de vivencias, de experiencias diversas, gente mas
adulta de lo que es y a veces mas anciana, gente sin alas, son lagrimas reales,
sin sueños que no sean los de un mundo ya creado por la sociedad de consumo.
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